Mi historia

"Todas las historias tienen un comienzo. Como muchas, esta empieza con un sueño: el sueño de curar a la primera persona; y hacerlo una y otra vez. El sueño de generar en todo el mundo el sentimiento de ayudar al prójimo; de marcar momentos en la vida de la gente que nunca sean olvidados. Y asumir responsabilidades, luchando para salvar vidas. El sueño de ganarle un pulso a la muerte, ahora y siempre... De momento, no puedo descansar: Mi Sueño por cumplir me espera"
(texto inspirado en el anuncio de Mercerdes-Benz de Gottlreb Darmler "Tengo un sueño que cumplir")

Bueno...no sé por dónde empezar, tal vez debería presentarme, ¿no?
   Me llamo Raquel y actualmente (¡por fin!) estoy estudiando Enfermería en la ULL . Tengo 20 años y mucha energía, además de ganas de aprender y saber cosas nuevas. 
   En este apartado de mi blog me gustaría reflejar un poco mi historia de por qué quise siempre ser enfermera, todo lo que he luchado por llegar hasta la universidad y también dejar constancia de ese Sueño, como yo llamo, y demás ilusiones que quiero cumplir de aquí a unos años.
Pues bien, allá voy. . .

   Recuerdo vagamente que, cuando tenía unos 12 años, en el cole comenzamos a hablar acerca de lo que seríamos. Recuerdo que me debatía entre militar y fisioterapeuta: lo primero por "llevarlo en la sangre", lo segundo porque me gustaba (y me gusta) dar masajes. Pero dos años después, con 14, no recuerdo bien la razón, cambié de opinión: comencé a interesarme por la enfermería. Y más claro me quedó cuando tuve que ser ingresada en el HUNSC.
  He de decir que no me fue nada fácil defender mis ideales, Mi Sueño. Much@s me dijeron durante años, desde los 14 en adelante, que no era lo mío, que no sería capaz, que por qué no me dedicaba a algo de letras, que a mi las ciencias no se me daban...y una sarta de cosas parecidas. Me llegué a frustrar muchísimo, sobre todo porque las asignaturas como matemáticas o física y química me costaban mucho y las suspendía. Pero era más fuerte mi decisión de llegar a ser algo que todo lo malo que pudiesen decirme. No fue fácil, tuve que luchar contra vientos y mareas, incluso en el último momento.
  Pero hubo alguien...que confió en mi. Sonrío al escribirlo, porque recuerdo su mirada, su voz pausada y su convicción, aquel verano de 2008 en el que me dijo "Te veré de enfermera". Y sí, sé que me viste luchar por ello, sé que me viste los dos años más que la vida me hizo esperar, sé que me ves donde estoy ahora...desde tu cielo. Tus palabras han sido mi aliento, mi fuerza. Te considero uno de mis ángeles. Gracias, profesor.

   Creo que en este momento, cuando pensé que todo estaba perdido, comencé a adoptar como amuleto a las ambulancias del SUC...en otro apartado del blog escribiré su historia =)

  Tras el bachillerato y PAU no pude acceder a la carrera, pues la note de corte era alta y...no me quedó más remedio que hacer un ciclo superior. Al principio todo fue bien pero...las cosas se tornaron de oscuro conforme avanzaba el primer curso. He de decir que estuve a punto de abandonar, porque sentía que la presión me podía. Barajé la opción de unas oposiciones a cuerpos de seguridad pero...al final pudo más mi coraje, el ponerme en mi sitio y saber decir Aquí Estoy YO y voy a luchar por mi sueño, por más obstáculos que me encuentre por delante los superaré como pueda, como sea. Hoy miro atrás y un escalofrío me recorre la espalda pues esos dos cursos no fueron de mi agrado, en cuanto a lo personal se refiere. Pero levanto con orgullo mi cabeza, pues aprendí a ser más fuerte, a defenderme, a luchar más aún si cabe por algo que se desea con toda el alma. Y aprendí que, si crees que es posible, acaba ocurriendo. Tuve que volver a hacer la PAU y al final...me llegó es buena noticia un día que, precisamente, me encontraba en un hospital.

  Cuando me dieron la noticia no me lo creía: me quedé en blanco. No reaccionaba, no reía ni lloraba. Stop. Cuando por fín pude reaccionar lloré, lloré lo que no está escrito. Y corrí hacia la ventana, a mirar al cielo y agradecer por fin que eso que tanto soñé llegase. Si alguien alguna vez ha deseado algo tanto como yo el poder estudiar lo que siempre he querido entenderá lo grande que es el sentimiento. Es tan inmenso que es muy complicado expresarlo. Sólo puedo decir que quien realmente quiera entenderlo que mire a mis ojos cada vez que hablo de ello, cada vez que evoco recuerdos...y quizá pueda vislumbrar ese brillo, esa ilusión que sugiere Mi Sueño.



  Y ahora, aquí me encuentro: estudio Mi Sueño. Sonrío porque me llega de alegría que, a pesar de tanto sufrimiento, el haber llegado hasta aquí. Pero no me confío, he de seguir luchando, pues aún este Sueño es un proyecto. Finalmente despertaré el día que me gradúe y me digan que, por fin, soy ENFERMERA.