Tengo muchísima ilusión, aunque he de decir que no deja de parecerme extraño que después de todo lo que he pasado esté por fin hoy donde estoy. Creo que esta sensación me seguirá acompañando, al menos, hasta que termine la carrera, día en el que tendré que asimilar que los sueños, si luchas por ellos, se vuelven realidad.
Hace un rato que he llegado del ambulatorio, al que fui esta mañana para conocer al que será mi tutor, Don M, un señor bastante agradable así a primera impresión. Tiene una mirada franca, y una sonrisa que invita a relajarte, pues la verdad que al ser la primera vez que le ví me sentí algo tensa. Pero en su consulta estaba una de mis compañeras, J, la cual me sonrió y me contó muy emocionada que le estaba gustando lo que había visto en las pocas horas de su turno.
Y bueno...no sé ahora no estoy inspirada, quisiera contar mil y una cosas pero me parece que eso lo dejaré para un ratito esta tarde, cuando llegue a las 8 después de haber estado seis horas en consulta con Dña B. A ver que tal se presenta este primer día. *.*